Hola, en esta semana he observado en el trabajo como incluso dándome cuenta me los saltaba con la excusa de que era sólo un momento, que luego se alargaba. Mucha resistencia a no usar el móvil para entretenimiento en los momentos libres.
Con la comida no he tenido dificultad en no comer carne roja, tampoco era algo muy exigente, pero si alguna vez he comido entre horas y he comido dulce, cuando me he conseguido controlar no paraba de mirar hacia la tentación y ha sido difícil e incómodo aguantarme.
Con el texto, me ha hecho darme cuenta que en mi multitud hay personajes más fuertes, como el iracundo, cuando este se presenta es como si el darme cuenta de mí se hiciera muy pequeño, me decía es sólo un personaje más, pero la voz sonaba demasiado baja y me era muy difícil salir de la identificación. Cuando estoy identificado no quiero subir al monte, no quiero que vengan los discípulos, quiero estar identificado.
Abrazos.